Amigo viajero, si estás planeando tu próximo viaje a San Bartolomé, es muy probable que aterrices en el asombroso Aeropuerto Gustaf III. Este es el portal de entrada a la isla, desde aquí comenzará tu aventura al volante.
Conocido también como el aeropuerto de Saint Bartélemy o aeropuerto de Remy de Haenen, es uno de los aeropuertos más pintorescos del mundo. Su famosa pista corta, bordeada de colinas y playa, lo ha convertido en la joya del Caribe.
El aeropuerto se encuentra es la localidad de Saint Jean, la segunda población más grande de San Bartolomé, por lo que estarás a solo un corto trayecto en coche de tu destino.
Para disfrutar al máximo de tu visita a San Bartolomé, no hay nada como la libertad de tener tu propio coche. Hay varias empresas de alquiler de coches en el aeropuerto para que puedas empezar tu aventura nada más aterrizar.
Debido a las estrechas carreteras y empinadas colinas de la isla, te recomendamos alquilar un coche pequeño o de tamaño mediano. Además, asegúrate de que el coche tenga aire acondicionado, porque el clima puede ser cálido.
A solo un corto trayecto en coche desde el aeropuerto, encontrarás una infinidad de hermosas playas, restaurantes exquisitos y tiendas de lujo. No te pierdas Gustavia, la capital de la isla, con su puerto encantador y sus calles bordeadas de boutiques de alta gama.
Para los viajeros procedentes de México, aquí tienes algunos consejos útiles. En San Bartolomé conducen en el lado derecho de la carretera - igual que en México. Además, la mayoría de los habitantes hablan francés e inglés, así que un pequeño diccionario de frases comunes en francés puede ser muy útil.
Al llegar a la isla, es probable que necesites llenar el tanque de tu coche. Hay varias gasolineras cerca del aeropuerto donde puedes hacerlo. Aunque los precios de la gasolina pueden ser más altos que en México, la isla es pequeña por lo que no tendrás que gastar mucho en gasolina.